"Solo después de un dolor intenso y atávico puede empezar a abrirse paso el conocimiento, la soledad infinita... la vida, en definitiva..."
Emocionada de haber guardado aquella camiseta en la que ponía que quizás algún día me acordaría de haber visitado una ciudad (quien me iba a decir a mí en aquel entonces...). Emocionada por querer, por ser querida, y por esa odiosa sensación a la altura de los pulmones. Y triste, por lo obvio.
Segura de que lo nuestro es nuestro, irremplazable, inolvidable. Y de que el tiempo será un aliado. Insegura, por tantas otras cosas.
Tan bonito.Y tan triste.
Tanto tanto...
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada